Esta salida con Luca, motivó el artículo sobre los riesgos de las rutas de trekking que se encuentran en internet. No descargué esta ruta en wikiloc pero disparó un par de razonamientos.
El primero fue si debía compartir este track y el segundo fue ponerme del lado de una persona que lo descarga.
¿Es responsable compartir un track fuera de los senderos autorizados? ¿Qué cuidados tiene que tener una persona al buscar y descargar una ruta de internet?
Todo empezó en el refugio Agostino Rocca.
Habíamos llegado desde Laguna Ilón y vi un enorme mapa ocupando una de las paredes del refugio. Es una carta topográfica del año 2008. Es gigante y está a la vista de todo el mundo.
¿Qué tenía de especial?
Sinceramente, aluciné. Me sorprendió saber que esa carta topográfica ya no se publica en ningún lugar. Son rutas que estuvieron habilitadas hace muchos años, pero ahora es como si nunca hubieran existido.
Saqué fotos a secciones del mapa que me llamaron la atención y al regreso las subí a un grupo de trekking para ver si alguien tenía ese mismo mapa o sabía dónde conseguirlo.
Enseguida, Luca me envió un audio por WA y me dice de ir a investigar uno de esos senderos. Uno que nos llevaría a una laguna.
Ya hablé de Luca en el posteo sobre el cerro Granítico. Si Luca te llama para una salida, no lo dudas mucho. Sólo queda preguntar dónde y cuándo.
Busqué pero no encontré ninguna información adicional sobre ese sendero en particular, salvo aquella foto que saqué. Sólo un comentario de Raul Llusa Ceppi recordando que alguna vez lo usó, pero ya en la década del 80 la senda estaba muy descuidada .
Así que no quedaba otra que ir al lugar y averiguarlo ahí.
Ya te adelanto que nunca encontramos ni un sendero ni marcas, ni nada. Si en los 80 el sendero estaba descuidado, ahora estaba definitivamente cubierto por vegetación.
Para no complicarnos con las cañas colihue, lo más sencillo fue seguir el cauce de un arroyo. Al final del verano bajaba con muy poca agua y solamente tuvimos que ir saltando de piedra en piedra.
El único indicio de actividad humana fue el hallazgo de una pila de chapas, esas viejas de fibrocemento. Imagino que estaban ahí para construir un refugio algo clandestino.
El objetivo era llegar al pie de una pared de piedra. Si superábamos la etapa del bosque todo resultaría más sencillo. O al menos es lo que pensábamos.
Antes de empezar a trepar esa pared, aprovechamos a cargar agua directo de unos bloques de hielo derritiéndose. Nos refrescamos y tomamos impulso.
Esa subida me sirvió para aprender cómo Luca leía la montaña y dibujaba con su bastón en el aire el recorrido por la pared de piedra.
Desde el inicio de la caminata iba grabando el recorrido con la aplicación de wikiloc, pero en varios lugares algo expuestos pensaba, ¿debería publicar el track o compartir la ruta exacta en redes sociales?
¿Cuáles serían las consecuencias de publicarlo? Alguien sin experiencia podría intentar seguirlo. Y si llega a pasar un accidente, ¿de quién es la responsabilidad?
Sería mía por publicarlo o la de la persona que sale a caminar
Finalmente llegamos a la laguna y almorzamos ahí. El verano se estaba despidiendo y corrían algunas ráfagas algo frías para estar quietos.
Para el regreso teníamos un par de alternativas.
Una opción tenía las mismas características del camino de ida: no era muy conocido, no sabíamos cómo resultaría caminar por ahí ni cuánto tiempo nos iba a llevar.
Y la otra alternativa bajaba de vuelta a un valle que ya habíamos recorrido algunas veces.
Como ya se había hecho algo tarde nos decidimos por el camino conocido. Aunque todavía teníamos que llegar hasta ahí.
A esa altura del día, con la sensación de estar reabriendo alguna ruta antigua, pensaba que no podría haber hecho el recorrido en solitario o ni siquiera con alguien en mi mismo nivel de experiencia.
Si no hubiera recibido el mensaje de alguien con la experiencia de Luca no me hubiera animado. Es más, ni siquiera lo hubiera considerado.
El regreso coincidió con la bajada desde el cerro Navidad hacia el valle del Goye, el mismo trayecto de la travesía Jakob a Laguna Negra.
Excelente video, muy acertado el razonamiento, y llamando a la precaución y a la seguridad como prioridad.
😉 Gracias Claudia. Saludos.
Ese tipo de trayecto y aventura es lo que más le gusta a Luca! Qué pena que se volvió a Italia! 🙁
Qué pena para nosotros 😉 El seguro está contento
Hola, hago trekking hace un tiempo ya conocí todos los refugios de la zona y realice las 5 lagunas el año pasado. Este año voy a ir al refugio viejo y después a la laguna azul. La verdad que una aventura así ya es un nivel extra avanzado, muy bueno que lo compartas así, publicarlo en internet hace que personas con muy poca experiencia subestimen la montaña y se crean Meiling en un abrir y cerrar de ojos. Mis respetos hacia sus aventuras y espero leer pronto otra.
Gracias David. Saludos