Cómo preparar una mochila de trekking liviana, sin pagar más

Hace tiempo elegí dejar los lujos en casa. Para ir más lejos hay que caminar más liviano. Para descubrir lugares nuevos hay que cargar una mochila libre de miedos.

Llenarla solamente de energía para llegar más alto.

El equipo de trekking con materiales livianos de calidad es una muy buena inversión. Es costoso y hasta que podamos conseguirlo lo mejor es armarse de ideas y estrategias para caminar sin mucho peso.

Al menos por unos pocos días podemos dejar atrás algunos lujos, ser realistas y pensar objetivamente sin temores infundados.

Cómo llevar menos peso en la mochila de trekking

Una de las cosas que más disfruto al salir a caminar por la montaña es que todo se vuelve más simple. Durante esos pocos días todo lo que necesite tiene que entrar en una mochila para cargar en mi espalda.

Y digo todo lo que necesite. No, todo lo que quiera.

En definitiva, aligerar una mochila de trekking sin pagar de más es saber elegir lo que es realmente imprescindible. 

La vida misma

Después de algunas experiencias aprendí a dejar atrás lo que no voy a necesitar. Primero, porque me vi sacando cosas de la mochila que nunca usé. Pero también terminé de entender algo que me parece fundamental en otros ámbitos de la vida:

Me daba cuenta que había llevado y cargado en mi espalda un montón de miedos.

Unas pocas caminatas me dieron una experiencia que trasciende un sendero de montaña y podría aplicarse en la vereda de la ciudad. No puedo cargar un montón de “por si acaso”.

Es la vida misma. ¿Cuántos de los temores que nos preocupan realmente llegan a concretarse?

Minimalismo

Y si hablamos de la vida misma ya habrás notado cuánto mejor se vive con poco lastre. Teniendo sólo lo que es de utilidad en el día a día.

Claro que hay tantas formas de vivir como personas y no me voy a meter con el estilo de vida de cada una. Todos tenemos nuestros matices. Nuestros irrenunciables por costumbres, gustos o necesidad.

En mi caso en particular, estoy dispuesto a llevar solo lo absolutamente necesario y dejar todo aquello que resulta superfluo si es que puedo vivir sin ello durante unos pocos días. 

Así que dejemos de lado todos esos miedos y con un poco de sentido común vamos a ver cómo preparar una mochila de trekking liviana y además: sin gastar dinero.

El peso de lo que lleves en la mochila es un balance entre:

• la calidad de los productos 
• el presupuesto 
• nuestras propias costumbres

Calidad y presupuesto

No te voy a decir nada nuevo. Esto ya lo experimentaste, lo viviste en tu bolsillo: el equipamiento de trekking de buena calidad y liviano cuesta mucho dinero. No es que sea caro, es costoso.

Hay un dicho que dice que el que tiene plata hace lo que quiere. ¿Crees que es realmente así?

Pero alguien alguna vez me dijo que el que no tiene plata, también hace lo que quiere. Enfocándonos en lo absolutamente más importante y con buenas estrategias podemos lograr lo que sea. 

¿Me entusiasmé mucho? Bueno, pero al menos se puede tener una mochila de trekking liviana. No perdamos el eje.

• Entonces el objetivo es ahorrar peso y dinero. 

Mi experiencia armando una mochila de trekking

Te voy a dejar algunas experiencias. Pero por favor tené en cuenta que pueden aplicarse en una caminata de una persona sola, dos o tres días acampando. Es lo que yo hago acá en la Patagonia. 

• Por estos lugares no tenemos plantas que generen alergias ni son comunes animales o insectos peligrosos. Lo aclaro para cuando llegue el momento de armar el botiquín.
• Aunque me encantaría, por el momento no tengo equipo de nieve para ski de travesía. Así que la mochila de trekking es para usar entre primavera y otoño. 
• Aclaro que la idea es acampar porque si pasas por refugios de montaña donde el sueño y la comida ya están solucionados, el peso se achica muchísimo. Casi que podrías caminar con una mochila de 30 lts.
• Además no voy a ir al extremo de cortarle el mango del cepillo de dientes. Hablo de soluciones con algo de sentido común. O al menos mi sentido común.
  • Por favor, aplica el tuyo. Todo depende de tus condiciones físicas y de salud, requisitos de ingesta de calorías, cantidad de días de la caminata, dificultad, acceso al agua y otros etcéteras.

¿Qué llevar en una mochila de trekking?

Básicamente, lo que llevamos en la mochila es:

• Comida
• Ropa
• Botiquín
• Bolsa de dormir
• Carpa

Para saber qué llevar en cada categoría hay que planificar

¡Nop! No es lo mío. Al menos, no con todos los detalles que harían falta. Alguna vez me encontré caminando y dándome cuenta que no había llevado comida para el último día, por ejemplo. Pero entiendo que es fundamental.

Lo que vayas a llevar en la mochila tiene mucha relación con:

• la ruta que tengas pensada
• y el pronóstico del clima

No se juega con el agua

A los seres humanos les resulta fundamental, vital. Ojo, a mí también 😉

Por eso, en la planificación de la ruta, hay que tener presente las fuentes de agua. No me refiero a los monumentos, sino a los lugares de dónde conseguirla y si conviene o no cargar con una botella grande encima.

No es lo mismo seguir una ruta junto a un arroyo que en una zona más aislada. Pero como mínimo deberías llevar una botellita de 500 ml que puedas recargar entre un punto de abastecimiento y otro. 

Si en cambio la ruta tiene poco acceso al agua o la vas a hacer en verano y lejos de la sombra, no te arriesgues. Mínimo 2 litros y no queda otra que cargarla. Eso te pasa por humano. 

Un consejo que no tiene nada que ver con el peso en la mochila: no esperes a tener sed para tomar agua. Quizás no tengas ganas de tomar agua, pero seguro te empieza a doler la cabeza y te vas a sentir con más cansancio.

Set de cocina para trekking

Prepará lápiz y papel para la lista del set de cocina. Aprendí que no necesito más que:

• un jarrito y una cuchara 

Sí, un solo jarrito para preparar desde el desayuno hasta la cena. Ni plato, ni tenedor y mucho menos un spork de aluminio o titanio de andá a saber cuántos $$$. Y en las últimas salidas ni siquiera llevé un vaso térmico. 

Como tapa del jarrito (para no perder calor y que hierva más rápido) uso un trozo de papel metálico que puedo llevar adentro. Gracias a mi esposa ❤ por este hack.

Tapa del jarro en acción:

La cuchara ni siquiera es de las grandes, una cuchara de postre.

Sólo queda sumar la garrafa chica y la hornalla. Aquí no hay muchas alternativas porque hacer fuego está prohibido.

Listo, todo el set de cocina dentro del jarrito. Mirá:

Comida

Durante estos días de caminatas acostumbro a comer menos. Y lo hago con raciones chicas que no me dejen con esa sensación de pesadez que me impida dar dos pasos seguidos.

Ojo, conozco algunas personitas que no dan un solo paso sin una picada de salame, queso y aceitunas en la mochila.

Si entendemos que la comida es el combustible que nos hace subir y recorrer tantos kilómetros no queda otra que elegir sólo aquella que mejor le sirve al cuerpo. Comida liviana para transportar, con calorías, proteína y grasas buenas.

AVISO: no soy, ni cerca, un experto ni voz autorizada para recomendarte qué comer. Como te puede estar pasando a vos, voy aprendiendo.

¿Viste cuánto dura una banana en la mochila? En pocas horas queda convertida en puré de banana.

Para bajar el peso, resultan mejor frutas desecadas como las rodajas de banana y frutos secos como maní, nueces y pasas de uva. El chocolate no se negocia y sigue siendo casi un deber. Todo esto puede servir tanto como desayuno como para picotear durante el día.

Para preparar un desayuno con mucha energía, en una bolsita tipo ziploc mezclo avena y proteína en polvo (se compran sobres individuales de distintos sabores). Para darle un punch le sumo algo de chocolate en polvo (el que tomabas mirando dibujitos) y algo de canela.

• La comida liofilizada o deshidratada es una muy buena opción, liviana, sabrosa y energética. Pero sigue siendo muy costosa.

Todavía sigo con algunos experimentos pero últimamente me resultaron muy bien unos sobrecitos individuales de polenta saborizada, las lentejas turcas que se hacen rápido y porciones chicas de arroz.

¿Casi igual a un estofado liofilizado? Ni cerca. Para ponerle un poco de onda, se puede llevar un trocito de salamín y un sobre con las especias.

¡La imaginación al poder! Es cuestión de inventiva y pruebas en el campo.

Como recurso de emergencia para recuperar energía bien rápido suelo tener un sobre de jugo en polvo o unas gomitas. Aunque si me las descubren en casa antes de salir, perdí.

• Para ahorrar espacio, conviene pasar la comida desde el paquete original a una bolsa antes de llevarla, con la ración que crees vas a necesitar.

Los lujos que dejo en casa y que suelo extrañar son el mate y mucha fruta. Prefiero no cargar con el termo, ni el mate y la bombilla. Por más chiquito y humilde que sea el equipo de mate, no vale la pena llevarlo. Y vos, ¿podés estar tres días sin un mate?

El primer día de caminata puedo llevar dos o tres sándwiches y huevos duros. Uso una heladerita de tela que nos quedó en casa de la época que los chicos llevaban el almuerzo al colegio, que conserva muy bien la temperatura. Además me sirve para tener todo organizado en un solo contenedor.

Es increíble cómo mantiene el frío un bolsito tipo heladerita y es de los más baratos

• En ese primer día también es clave la última comida que tengamos en casa. Generalmente, el desayuno. Aprovechar la comodidad de casa y tomar un buen desayuno con los nutrientes que quizás no tengamos los próximos días.

Otra estrategia que todavía no intenté es manejarme con comida fría. Nos ahorramos el peso y el espacio de la garrafa de gas.

¿Qué te parece? ¿Valdrá la pena?

Ropa – Respetar las capas y olvidarse del capaz

Teniendo presente el pronóstico, además de lo puesto sólo agrego un pantalón largo, buzo (un abrigo sin botones ni cierres) y una campera muy liviana y que se compacte. Por eso de vestirse en capas. Pero sólo una prenda por capa. Solamente agrego un par de medias de recambio. Y eso es todo.

Teniendo zapatillas de trail running (de secado rápido) en lugar de botas de trekking, hace que vadear un arroyo no requiera llevar tampoco calzado tipo crocs. Ya sé, las zapatillas no van en la mochila. Pero todo el peso suma y creo que es conveniente un par de zapatillas livianas a un par de botitas de trekking.

• Para dormir, olvidate el lujo de una almohada (ni siquiera las inflables). La campera o la ropa que no uses sirve perfectamente. 

Hablando de miedos: el botiquín

Creo que hay que armarse de un botiquín para heridas poco profundas, con un desinfectante, curitas y alguna venda. Analgésicos y protector solar. Cualquier otra emergencia que requiera más atención, será necesario dejar la caminata para otro momento y volver rápido por ayuda.

Como te aclaré más arriba, en la Patagonia no tenemos plantas ni animales peligrosos. O al menos que yo me haya encontrado.

Un cepillo de dientes, claro, pero me parece que la pasta de dientes por dos o tres días, puede dejarse en casa. Además nuestra huella en el lugar va a ser mucho menor.

En mi caso tengo pendiente incluir una manta térmica de emergencia. Por el tamaño y el peso no hay problema.

No estoy mencionando algunos elementos de seguridad que siempre se recomiendan:

• Silbato
• Manta térmica
• GPS/Celular/Brújula/mapa
• Linterna
• Rastreador satelital

Aislante, bolsa de dormir y carpa

No se puede ahorrar mucho y de hecho junto al calzado creo que deberían ser parte de la inversión inicial. 

En las primeras caminatas obviamente salimos con lo que tenemos. Pero de a poco hay que ir mejorando el equipo.

Las bolsas de dormir de pluma son más compactas y livianas que las de material sintético. Es un tema complejo porque hay muchos factores para tener en cuenta. 

Y en el caso del confort y temperatura se subestima la incidencia que tiene el aislante. Como dije, es un tema complejo que da para mucho.

En el caso de la carpa, para épocas de muy buen clima directamente podrían obviarse o usar otras coberturas como lonas o tarps. Eso si no te molestan los mosquitos o los tábanos. 

En mi caso en particular, la carpa Naturehike cloud up 2 tiene un sobretecho que puede usarse solamente con el mat o alfombra. Es decir que podría llegar a funcionar como un tarp.

Como dije más arriba, aligerar una mochila de trekking tiene más que ver con la imaginación que con el dinero. Por eso me encantaría saber qué estrategias usas vos para caminar con menos peso. ¿Qué cosas podes dejar y cuáles no se negocian?